Urbanización sostenible: así se asientan los cimientos de las nuevas ciudades

De la jungla de asfalto a la urbanización sostenible, las ciudades se adaptan a la crisis climática antes y después de sufrir sus consecuencias.

Las ciudades crecen, y con ellas aumentan tanto su contribución al cambio climático como las consecuencias que sufren por el aumento de las temperaturas. Apenas ocupan el 2 % de la superficie terrestre, pero son las responsables del 70 % de los gases de efecto invernadero. Se estima que un 52 % de la población mundial ya vive en las urbes. Una cifra que alcanzará el 70 % en 2050, lo que significa que sus emisiones también serán mayores.

Las noticias nos alertan del impacto que el cambio climático tiene sobre las ciudades. Las últimas en sufrir los desastres han sido las localidades del norte de Italia que han quedado sepultadas bajo el agua. La forma en la que vuelven a erguirse las urbes tras los daños es decisiva. La reurbanización sostenible es el enfoque más adecuado para que las ciudades minimicen su aportación al cambio climático y logren adaptarse mejor a sus efectos.

¿Qué voy a leer en este artículo?

¿Qué es la reurbanización sostenible?

Cuando una ciudad sufre daños graves, la necesidad de reconstruir espacios, edificios e infraestructuras presenta la oportunidad de replantearlos desde el punto de vista de la resiliencia y la anticipación a otros posibles desastres que antes no eran tan previsibles.

“Si está bien planificado y gestionado, el urbanismo puede ser un instrumento poderoso para lograr el desarrollo sostenible ”.

En el contexto del cambio climático, se están poniendo en marcha nuevos enfoques que entienden que las ciudades pueden ser parte de la solución a los problemas que enfrenta nuestro mundo en la actualidad, y no su causa. Si está bien planificado y gestionado, el urbanismo puede ser un instrumento poderoso para lograr el desarrollo sostenible.

La reurbanización sostenible consiste en planificar y diseñar las ciudades de una manera ambientalmente consciente y socialmente responsable. No se trata de tirarlo todo y empezar de cero, sino de repensar su infraestructura y mejorarla de manera inteligente.

Además, la urbanización sostenible enfatiza la participación comunitaria y la equidad social, asegurando que los residentes locales también se beneficien de estos cambios. El objetivo es lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles.

“La urbanización sostenible consiste en planificar y diseñar las ciudades de una manera ambientalmente consciente y socialmente responsable”.

Consecuencias del cambio climático sobre las ciudades

El cambio climático es una amenaza seria para nuestras ciudades y sus habitantes. El aumento en la frecuencia e intensidad de eventos climáticos extremos, como inundaciones, tormentas y sequías, puede causar grandes daños en infraestructuras urbanas, viviendas y, por supuesto, en la vida de las personas. El aumento del nivel del mar también puede ser un gran problema cuando estos asentamientos están en zonas costeras.

Por otro lado, el cambio climático puede afectar a la calidad del aire de las ciudades, ya que aumenta la contaminación y la concentración de partículas en el aire, lo que tiene graves consecuencias para la salud. Además, las altas temperaturas pueden crear lo que se conoce como isla de calor en áreas urbanas densamente pobladas.

La urbanización sostenible de las ciudades que surgen de sus propios escombros

Cambiando la forma en que planificamos, construimos y gestionamos nuestras ciudades podemos reducir su huella de carbono y conseguir espacios resilientes que se adapten al aumento de las temperaturas y mejoren la calidad de vida de las personas.

Es el caso de Greensburg, una comunidad agrícola del suroeste de Kansas, que se reconstruyó "verde" después de que un tornado EF5, el más violento, pasara a más de 320 kilómetros por hora y casi borrara la localidad del mapa en 2007. Más del 90 % de los edificios y árboles habían desaparecido en cuestión de minutos. Doce personas murieron.

La idea de reconstruir de manera sostenible surgió casi de inmediato, dijeron los dirigentes locales en una entrevista con el Whashington Post. En 2007, Greensburg se convirtió en la primera ciudad del país en exigir que todos los edificios municipales contasen con la certificación LEED.

El ayuntamiento, el hospital, el juzgado, una biblioteca… se construyeron bajo criterios de eficiencia energética, con sistemas de climatización sostenibles y con cisternas que permiten la recolección del agua de lluvia para el riego y otras actividades.

Además, una década después del tornado, Greensburg había conseguido convertir aquello que la destruyó en su mejor aliado. Ahora extrae el 100 % de su electricidad de un parque eólico, lo que la convierte en una de las pocas ciudades de los Estados Unidos que funciona únicamente con energía renovable.

Urbanización sostenible frente a inundaciones

Los esfuerzos de Greensburg son un ejemplo a seguir por comunidades de todo el mundo que se enfrentan a fenómenos meteorológicos devastadores como incendios forestales, tsunamis, e inundaciones. La urbanización sostenible promueve la resiliencia de las ciudades reduciendo el riesgo de desastres, mitigando el cambio climático y adaptándose a sus impactos.

Los jardines de lluvia de São Paulo

Uno de los enfoques más populares son las soluciones basadas en la naturaleza. São Paulo (Brasil) tiene un alto riesgo de inundaciones urbanas debido al paisaje de la ciudad y al aumento de las precipitaciones. Para mejorar la resistencia a las inundaciones, la ciudad está convirtiendo áreas de cemento y asfalto en zonas verdes, absorbentes y multifuncionales llamadas jardines de lluvia.

Los jardines actúan como pequeños estanques de retención de agua de lluvia y, una vez llenos, el exceso de agua se desvía al sistema de aguas pluviales. Brindan espacios verdes que benefician a la biodiversidad local y a los residentes al mismo tiempo que ayudan a reducir las temperaturas urbanas. Los jardines de lluvia de São Paulo también cuentan con plantas nativas, que albergan una diversa fauna local como ranas, insectos y pájaros.

La ciudad esponja de Wuhan

Del mismo modo, el programa de 'ciudad esponja' de Wuhan utiliza infraestructura verde para evitar inundaciones. El proyecto incluye jardines urbanos, parques y espacios verdes, que están diseñados para permitir que el agua se filtre cuando llueve.

Además de prevenir inundaciones, el proyecto trae múltiples beneficios colaterales: el área alrededor del parque del río Yangtze de la ciudad secuestra 724 toneladas de carbono al año, mientras que las temperaturas en el parque pueden ser tres grados más bajas que en el resto de la ciudad.

El canal anti-inundaciones Fargo-Moorhead

La infraestructura regenerativa tiene un papel protagonista en la urbanización sostenible. En Dakota del Norte se está desarrollando la primera iniciativa de financiación verde en Estados Unidos diseñada específicamente para la adaptación y mitigación del cambio climático. Hablamos del desvío de aguas de inundación Fargo-Moorhead, una construcción destinada a hacer frente a la amenaza de desbordamientos e inundaciones del río Rojo.

El proyecto surgió a partir de los estudios realizados tras la histórica inundación del río, que causó daños estimados en 3.000 millones de euros. Una vez completado, protegerá a más de 235.000 personas de los principales núcleos de población entre Fargo y Moorhead.

La construcción consta de un canal de desvío de 30 millas (48 kilómetros) alrededor del área metropolitana de Fargo, además de una serie de infraestructuras como presas, canales, puentes y otras estructuras que controlen las posibles futuras inundaciones del río.

En resumen, la urbanización sostenible es un enfoque vital para garantizar que nuestras ciudades crezcan y evolucionen de manera responsable y resiliente. Al implementar soluciones innovadoras y centradas en el medio ambiente podemos lograr un futuro urbano más verde y habitable para todos.

Fuentes: